Por la carretera de Ibiza Sta. Eulalia o siguiendo por Jesús, este trayecto tiene mayor encanto, atraviesa la montaña llena de pinos. Es como una garganta profunda entre altas colinas que en sus extremos se convierten en riscos abruptos. De arena fina y fondos igualmente arenosos, es un lugar idóneo para la gente que busca tranquilidad y comodidad.
Playa de Santa Eualalia
En el casco urbano, al pie de un cuidado paseo marítimo con todos los servicios que se precisen, es una bahía grande y abierta.
Llaman la atención sus aguas teñidas por la gran variedad de tonos del fondo marino, que contrastan con la palidez de la arena. Está bien protegida de los vientos, el lugar ideal para un buen día de baño.
Playa del Rio de Santa Eulalia
También llamada Playa de los Marineros.
Siguiendo el paseo marítimo, es una lengua de arena provocada por la desembocadura del río, que va adquiriendo desnivel a pocos metros de la orilla, siendo el lugar adecuado para practicar los deportes náuticos preferidos. Es interesante recorrer los parajes que la rodean, además, es cómodo saber que uno se encuentra tan cerca de la villa.
Calò de S´Alga
Tan cerca de Sta. Eulalia que es un paseo. Es increíble como un lugar tan pequeño puede convertirse, por sus fondos marinos, en un atractivo para los amantes del buceo.
Playa des Niu Blau
Los amantes de la naturaleza y actividades de agua se encontrarán con una rada de cien metros junto a la desembocadura de un torrente, rodeada de coníferas, un paisaje singular y extraordinario.
Cala Pada
Con arena natural y de grano medio, es como un cangrejo de mar cuyas patas delanteras estuvieran cubiertas de verdes pinos.
De fácil acceso y viento benévolo es casi imposible no practicar algún deporte.
Es Cana
Dejamos atrás Sta. Eulalia, y siguiendo la carretera encontraremos la playa situada en una hondonada de la costa, esto hace que tenga un gran recorrido antes de llegar a una profundidad de dos metros dándola un carácter de seguridad.
El carácter marinero se lo da un pequeño puerto pesquero, así como los típicos embarcaderos donde los isleños guardan sus barcos.
Cala Llenya
Pasado el pueblo de S. Carlos es una cala rodeada de pinos que llegan hasta el mismo borde de la arena. Los acantilados que la flanquean despiertan el placer de caminar después de haber disfrutado de sus aguas claras.
Todos los servicios que ofrece son de calidad, las familias se encontrarán en un lugar idílico.
Cala Mastella
Entre dos farallones que emergen del mar se formó la pequeña cala Mastella de arena clara y fondos con una atractiva vegetación, ideal para los amantes del submarinismo de superficie.
Los pequeños embarcaderos que la rodean crean un ambiente sin par.
Cala Boix
Hay que bajar un buen número de escaleras talladas en la roca, pero merece la pena ir. Su arena es diferente al de otras calas ibicencas, es oscura pero en contraste el agua es cristalina.
Estas características libran a esta cala de urbanizaciones, lo cual la hace aun más apetecible.
Pou des Lleó
Su nombre le viene de un pozo de agua dulce (el pozo del león).
También su forma es como una gran boca. En ambos lados se encuentran los embarcaderos donde los pescadores guardan sus llauds.
Los alrededores son de una belleza extraordinaria, desde uno des sus rincones se ve la isla de Tagomago, isla virgen a donde se puede ir a tomar el sol en pequeñas embarcaciones. Un privilegio.
Playa des Figueral
Es una larga playa con mas de 300m de gran belleza que combina las zonas arenosas con los rincones rocosos. Los pequeños islotes de roca parecen esculpidos a capricho. Todo esto junto convierte a esta cala en un lugar tan atractivo como inolvidable.
Cala de San Vicent
Llegamos casi al norte de la isla. "La Cala" como por todos es conocida, está rodeada de montañas, desde su paseo se disfruta de una bahía de agua clara y cristalina, parece una piscina de fondo azulado.